Chapter 1448
Ademas, era plenamente consciente de que Neera era objeto de envidia y odio, pero no le proporcion6 la proteccién adecuada a tiempo, lo que la llevé a sufrir un dafio tan significativo.
Toda esta calamidad le sucedié a Neera Unicamente por su culpa.
No hacia falta decir que Adriana no lo perdonaria. En caso de que le sucediera algun dafio a esa chica, ni siquiera él mismo se lo perdonaria, y mucho menos a Adriana.
Cuando Adriana se incliné hacia su abrazo, sus pufios bajaron gradualmente hasta que lo rodeé con sus brazos, sollozando como un animal herido.
“Chad Gordon, te odio hasta los huesos... te odio...
Chad apoy6 la barbilla en su hombro y cerré los ojos con fuerza. El peso del arrepentimiento lo consumié hasta el punto de pensar que se iba a volver loco, pero todo lo que pudo hacer fue consolarla pacientemente. “Si te hace sentir mejor, 6diame. Castigame como quieras, pero ten por seguro que pase lo que pase, Neera estara bien. Encontraré al mejor médico para tratarla. Te lo prometo, ella mejorara...”
Mientras los dos estaban desconsolados y buscaban consuelo en el abrazo del otro en el piso de abajo, Jean se sento sola junto a la cama de Neera en el dormitorio de arriba. Su mirada permanecié fija en el palido rostro de Neera, como si nunca se cansara de mirarla.
En ese momento, las secuelas de la bofetada en la cara de Neera persistieron; su mejilla seguia ligeramente hinchada, un claro recordatorio del trauma reciente. Era un espectaculo desconcertante.
Incapaz de resistirse, extendid la mano y su toque fue una tierna caricia, como si intentara borrar las marcas, con la esperanza de aliviar su dolor.
Sus movimientos eran delicados, como si temiera causarle mas dafio.
Cuando estaba lejos en el Distrito Veintiuno y recibio la noticia del secuestro de Neera, anhelaba que le crecieran un par de alas para poder regresar rapidamente.
La ansiedad de ese momento fue tan abrumadora que deseo no volver a soportarla nunca mas en su vida. En su viaje de regreso, la inquietante imagen de la expresion triste de Neera al partir se repitid en su mente. De repente, se encontré despreciando su decision y preguntandose por qué tenia que irse.
Si hubiera sabido los tragicos acontecimientos que se desarrollarian en su ausencia, nunca habria ido, independientemente de las circunstancias.
Innumerables emociones surgieron dentro de él (arrepentimiento, ira, ferocidad, remordimiento y preocupacién) empujandolo al borde de la locura.
Cuando le Ilego la noticia a su regreso al Distrito Catorce, se apresuré al almacén sin demora.
Antes de irrumpir, imagino innumerables posibilidades en su mente.
Sin embargo, lo que vio en el interior superé sus expectativas. Incluso ante la muerte, esta mujer resiliente se nego a ceder. Al observar el mosaico de cicatrices en su cuerpo, pudo imaginar las dolorosas luchas que debié haber soportado.
Fue su desafio lo que llevé a quienes estaban enojados con ella a someterla a un trato tan brutal.
11:50 lunes, 4 de diciembre O
Era muy consciente de lo fuerte que podia ser Neera, pero en ese momento, se encontré deseando que ella no fuera tan resistente.
La mera idea de lo que podria haber ocurrido si hubiera llegado un momento después le provoco escalofrios.
Su figura esbelta y fragil, apoyada en la barandilla, parecia como si pudiera colapsar en cualquier momento.
La perspectiva de irrumpir solo para presenciar su caida era demasiado para él; creia que sin duda lo llevaria a la locura. Esta idea inquietante invadid su mente, haciendo que las esquinas de sus ojos se volvieran carmesi una vez mas. Sacudié la cabeza, cerré los ojos y se obligé a calmarse, decidido a no dejar que sus pensamientos se salieran de control.
Al tocar el cuerpo de Neera, notd que su temperatura era normal en ese momento. Respirando profundamente, se levanté y salié del dormitorio.
Lan estaba en el pasillo, esperando. Tan pronto como vio emerger a Chad, se acercé apresuradamente.
“Sefior. Beauvort, se hace tarde y no has comido nada en todo el dia. Por favor, primero coma algo para llenar su estomago. Si continuas muriendo de hambre asi, tu cuerpo no podra soportarlo. Si la sefiora Beauvort te ve asi, seguramente se le rompera el corazon.
A pesar de la sugerencia, Chad sabia que Jean no aceptaria la idea de comer.
Como se anticipd, Jean negé con la cabeza, sin mostrar ninguna inclinacién a bajar a comer. En lugar de eso, le hizo una sefia para que fuera al estudio.
“4Donde estan los que han sido detenidos?” pregunto sin rodeos y con frialdad al entrar. Lan respondio honestamente: “Todavia estan en ese almacén y atin no se han movido. ; Quieres que los traiga?
“No es necesario”, respondié Jean sin dudarlo. Con voz tranquila, dio sus instrucciones metddicamente. “Simplemente trata con ellos alli como mejor te parezca. No te preocupes por nada. Vaya personalmente; Sabes qué hacer.”
Lan asintié en reconocimiento de la orden. “Si.”
Luego transmitid otra informacion: “Sefior, ya envié gente para detener a la familia Logan. En cuanto a Phoebe, también lo han encontrado. Actualmente se encuentra bajo nuestra custodia. gCémo planeas manejar esto?Nôvel(D)ra/ma.Org exclusive © material.
Una profunda malicia aparecié en los ojos de Jean cuando escuché eso. Sus delgados labios se abrieron lentamente, una voz escalofriante saliendo de su garganta.
“Ni uno solo de la familia Logan se salvara. En cuanto a Phoebe, por mucho que haya conspirado contra Neera, se le pagara del mismo modo. Ojo por ojo, diente por diente”.
“Si, sefior!”
Con eso, Lan se fue y se dirigid directamente al almacén para realizar los pedidos. En ese momento, esos hombres robustos estaban cautivos alli. El cielo ya se habia oscurecido, dejando el almacén en sombras.
En el interior, solo una lampara débilmente iluminada emitia un tenue resplandor amarillo. La lampara se balanceaba suavemente mientras el viento se filtraba ocasionalmente por las rendijas de la puerta, envolviendo el espacio en una atmésfera espeluznante.
Cuando Lan entré, sus subordinados lo vieron y rapidamente lo saludaron respetuosamente: “Sr. Morrison, estas aqui”. Lan asintid en reconocimiento y luego se volvié para inspeccionar la habitacion.
Sin demora, alguien, con astucia y tacto, acercé una silla y la colocd firmemente detras de él.
Lan tomé asiento, con una pierna cruzada casualmente sobre la otra, exudando un aura de confianza.
Con una mirada condescendiente, escudrifié a los pocos individuos que estaban atados y arrodillados en el suelo. Su expresion era fria, pero la comisura de su boca se curvo en una sonrisa malvada, lo que inexplicablemente provocaba escalofrios por la espalda.
Uno de ellos, que nunca antes se habia encontrado con él en el Gremio Bartitsu, inmediatamente comenz6 a armar un escandalo en un ataque de ira.
“4Quién eres? gCon qué derecho nos detienes aqui? gSabes quiénes somos? , Puedes permitirte el lujo de ofendernos? grito el hombre.
Después de escuchar esto, Lan dejé escapar una risa fria. “;Oh? gEn serio no sé quiénes son ustedes? Por qué no me lo dices? Ahora estoy de humor y tengo tiempo para escuchar sus presentaciones. Entonces, mientras todavia puedas hablar, habla mas. Me temo que no tendras la oportunidad de hablar mas tarde”.
Los ojos del hombre se abrieron con ira mientras miraba a Lan y alzaba la voz.
“jDeja de actuar tan altivo y poderoso aqui! jEstas tan lleno de ti mismo! ,De verdad crees que nos asustamos facilmente? Déjame decirte que estas en un gran problema, gentiendes? Este es el territorio del Gremio Bartitsu, y el Gremio Bartitsu quiere la vida de Neera. jSi te atreves a interferir, estas cortejando a la muerte! Si sabes lo que es bueno para ti, vamos ahora y entregaremos a Neera/. De lo contrario, cuando el Gremio Bartitsu se dé cuenta de que no hemos regresado, definitivamente enviaran gente para tratar contigo. jEntonces tendras que afrontar las consecuencias!